La apnea del sueño es un trastorno frecuente, en el que las personas hacen una o más pausas en la respiración, es decir, dejan de respirar varias veces a lo largo de la noche, lo cual provoca que el cuerpo no obtenga el oxígeno necesario para su buen funcionamiento.
Las pausas en la respiración pueden durar pocos segundos o incluso varios minutos. El rango de pausas en la respiración, que tiene una persona que padece de apnea, va de las 5 a las 30 veces por hora de sueño. Por lo general en estos casos (leves) la respiración vuelve a la normalidad, en ocasiones con un fuerte ronquido y en otras con sonido parecido al que hace una persona cuando se atraganta; sin embargo existen casos severos donde las pausas ocurren más de 30 veces, por hora de sueño.
Una persona que sufre de apnea pasa de un sueño profundo a un sueño liviano, lo cual interrumpe le descanso nocturno y pone su salud en graves riesgos tales como presión sanguínea alta, obesidad, derrame cerebral, diabetes, arritmias, ataques y enfermedades del corazón.
Entre los síntomas que se pueden presentar en el paciente están: ronquidos, orinar mucho durante la noche, dolor de cabeza por la mañana, cansancio e incluso en los hombres pueden presentarse problemas como la impotencia sexual.
El adecuado tratamiento a este problema proporciona un sueño totalmente renovador de inmediato en el paciente, el cual se ve reflejado en una mejora de energía durante el día.